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La muerte de los cántabros Jaime Gil y Diego Calvo, piloto y copiloto respectivamente del Seat Marbella con dorsal 131, tiñió de luto la cuadragésimo cuarta edición del Rally de Villa de Llanes que desde el momento del accidente que provocó la tragedia quedó suspendido.

El suceso ocurrió en el segundo de los pasos por el Alto del Fito, en la bajada hacia Ribadesella, donde el Seat Marbella sufría una salida de carretera y un violento golpe que dejaba sin respiración al mundo de este deporte.

El equipo del Racing Stage Services, consternado por lo ocurrido, quiere desde estas líneas mandar un sentido pésame a familiares y amigos de Jaime Gil y Diego Calvo.

En lo deportivo el equipo acudió a tierras asturianas con uno de los coches cliente de la estructura, un Opel Adam R2, con el fin de sumar unos valiosos puntos de cara a la Copa de España y para dar descanso a la mecánica del Skoda Fabia R5 que está siendo sometida a una exhaustiva revisión con vista al Rally de Ourense Ribeira Sacra de esta semana.

Así las cosas, Jorge Pérez acudía a la cita sin haber probado el coche, lo que viene siendo una constante para el piloto de Salceda que con todo firmó una prueba sin complicaciones a pesar de la dificultad de los tramos hasta la séptima especial en que el evento quedaría suspendido.

El equipo viajará ahora a la Ribeira Sacra donde defenderán la segunda plaza en el Camopeonato Gallego, un rally del gusto de Pérez y que vuelve tras la pandemia del COVID y el fallecimiento de su creador, Roberto Soto, en 2019. 

Para ver los tiempos detallados de los tramos y clasificación general del XLIV Rally Villa de Llanes pinchar aquí.

Prensa Racing Stage Services.